Las esferas de Gaia, la madre Tierra están afectadas
en su estructura vital.La litosfera, la atmósfera, la
hidrosfera , la biosfera y al interior de esta , la humanósfera ,
agonizan. :
La crisis se refleja en Cartagena de Indias y la mejor manera de
solucionarla es construyendo el desarrollo humano sostenible, y el
fortalecimiento de la educación ambiental formal y no formal para asi
dar término a las estructuras económicas, sociales, y políticas injustas
,predominantes.
La primera década del siglo XXI los dos años subsiguientes registran
uno de los más importantes índices de desastres y siniestros ambientales
en la historia de la humanidad, a la par de los índices extraordinarios
de la contaminación del aire, el agua y la tierra, al igual que la
extinción de la vida, en todas sus manifestaciones.
Todo conduce a pensar que vivimos el final del mundo; sin embargo no es esto; es sólo el comienzo del fin, que continuará cambiando, solo para empeorar.
Efectivamente, es el comienzo del epilogo del único planeta, Gaia la tierra madre, que nos alberga en su seno;es el fin apocalíptico como se aprecia en cada una de las esferas de su estructura vital, tal como se expresa en la litosfera: en la degradación química y física del suelo, la erosión y la contaminación de esta como expresión final en todos los continentes.
De igual forma, los mares y los ríos del mundo están contaminados, humedales, ríos, y arroyos desaparecen a diario y la posesión y disposición cotidiana del “agua dulce” se perfila como el primer detonante de la tercera guerra mundial cuyo sendero lo marcan más de 40 conflictos internacionales por la propiedad del liquido vital.
No obstante, la atmosfera también recibe cada año más de 8.000 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono, el gas más importante en la generación del cambio climático actual, cuyos efectos ponen en duda, la continuación de la vida en el planeta.
Esta, la vida se torna cada día más frágil en la Tierra al punto que el 60% de la capa vegetal del orbe, ha sido destruidos, al igual que miles de especies de animales superiores y de otros reinos vivos de los organismos inferiores.
Colombia y Cartagena de Indias reproducen las condiciones planetarias al punto que en los primeros 12 años del siglo XXI:
• Hemos sufrido los incendios forestales mas pavorosos, de las últimas cinco décadas en Colombia
• El aumento del nivel del mar amenaza a las comunidades del litoral y de las islas, las cuales al igual que en diversas regiones de la Tierra sufren el paso devastador de huracanes y vendavales, el aumento de las tormentas eléctricas, y prolongados periodos de sequia e inundaciones, factores asociados al calentamiento global.
• La erosión de las costas es cada día mas obstenible , al igual que la de las colinas que circundan la ciudad, las cuales emulan los procesos de degradación de las cordilleras y de los Montes de María en Bolívar.
La biodiversidad y las especies tienden a ser precarias y en consonancia con ello, diversas especies de plantas y animales mamíferos desaparecen para siempre del territorio Caribe; mención especial merecen las 25 especies de aves canoras ,en vía de extinción, las mariposas , las abejas y otros insectos articulados a la trama de la vida.
Todo conduce a pensar que vivimos el final del mundo; sin embargo no es esto; es sólo el comienzo del fin, que continuará cambiando, solo para empeorar.
Efectivamente, es el comienzo del epilogo del único planeta, Gaia la tierra madre, que nos alberga en su seno;es el fin apocalíptico como se aprecia en cada una de las esferas de su estructura vital, tal como se expresa en la litosfera: en la degradación química y física del suelo, la erosión y la contaminación de esta como expresión final en todos los continentes.
De igual forma, los mares y los ríos del mundo están contaminados, humedales, ríos, y arroyos desaparecen a diario y la posesión y disposición cotidiana del “agua dulce” se perfila como el primer detonante de la tercera guerra mundial cuyo sendero lo marcan más de 40 conflictos internacionales por la propiedad del liquido vital.
No obstante, la atmosfera también recibe cada año más de 8.000 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono, el gas más importante en la generación del cambio climático actual, cuyos efectos ponen en duda, la continuación de la vida en el planeta.
Esta, la vida se torna cada día más frágil en la Tierra al punto que el 60% de la capa vegetal del orbe, ha sido destruidos, al igual que miles de especies de animales superiores y de otros reinos vivos de los organismos inferiores.
Colombia y Cartagena de Indias reproducen las condiciones planetarias al punto que en los primeros 12 años del siglo XXI:
• Hemos sufrido los incendios forestales mas pavorosos, de las últimas cinco décadas en Colombia
• El aumento del nivel del mar amenaza a las comunidades del litoral y de las islas, las cuales al igual que en diversas regiones de la Tierra sufren el paso devastador de huracanes y vendavales, el aumento de las tormentas eléctricas, y prolongados periodos de sequia e inundaciones, factores asociados al calentamiento global.
• La erosión de las costas es cada día mas obstenible , al igual que la de las colinas que circundan la ciudad, las cuales emulan los procesos de degradación de las cordilleras y de los Montes de María en Bolívar.
La biodiversidad y las especies tienden a ser precarias y en consonancia con ello, diversas especies de plantas y animales mamíferos desaparecen para siempre del territorio Caribe; mención especial merecen las 25 especies de aves canoras ,en vía de extinción, las mariposas , las abejas y otros insectos articulados a la trama de la vida.
En consonancia con lo anterior, a manera de síntesis podemos afirmar
que la vida de Gaia desaparece de manera inexorable! .Cada día hay que
reconocer que muchas especies desaparecen para siempre! Descansen en
paz, junto con los
Sin embargo, los ambientalistas no nos amilanamos ante el apocalipsis que se ve llegar y menos aun ante las catástrofes que a diario ocurren en el planeta, y no nos resignamos a ver llegar el día del juicio final!
Por ello ante el capitalismo salvaje predominante y la globalización, ante la injusticia social predominante, ante la agonía de la tierra madre, quienes hicimos de nuestro proyecto de vida el ambientalismo, proponemos el desarrollo humano sostenible, ( del cual se olvidaron los gobernantes de Colombia pese a estar en la Constitución y las leyes), como la posibilidad de garantizar el disfrute racional y equitativo de los recursos naturales y los demás bienes terrenales por las generaciones presentes, sin afectar los intereses de las generaciones futuras.
Finalmente, continuamos izando la bandera de la educación ambiental, formal y no formal reconocida por las Naciones Unidas como la estrategia más pertinente para afrontar con éxito el cambio climático, la crisis ambiental contemporánea y el apocalipsis que se nos vino encima en nombre del progreso ,agenciado por los modos de producción de las sociedades injustas, y sostenido por el Estado que detenta el poder por la fuerza y la sin razón sobre las mayorías desposeídas, contaminadas en su ser físico
Y espiritual.
Sin embargo, los ambientalistas no nos amilanamos ante el apocalipsis que se ve llegar y menos aun ante las catástrofes que a diario ocurren en el planeta, y no nos resignamos a ver llegar el día del juicio final!
Por ello ante el capitalismo salvaje predominante y la globalización, ante la injusticia social predominante, ante la agonía de la tierra madre, quienes hicimos de nuestro proyecto de vida el ambientalismo, proponemos el desarrollo humano sostenible, ( del cual se olvidaron los gobernantes de Colombia pese a estar en la Constitución y las leyes), como la posibilidad de garantizar el disfrute racional y equitativo de los recursos naturales y los demás bienes terrenales por las generaciones presentes, sin afectar los intereses de las generaciones futuras.
Finalmente, continuamos izando la bandera de la educación ambiental, formal y no formal reconocida por las Naciones Unidas como la estrategia más pertinente para afrontar con éxito el cambio climático, la crisis ambiental contemporánea y el apocalipsis que se nos vino encima en nombre del progreso ,agenciado por los modos de producción de las sociedades injustas, y sostenido por el Estado que detenta el poder por la fuerza y la sin razón sobre las mayorías desposeídas, contaminadas en su ser físico
Y espiritual.
No hay comentarios:
Publicar un comentario